De la salud mental a la diversificación asistencial

A mediados del siglo XIX Reus era la segunda ciudad de Cataluña, y el impulso económico y social hizo posible diferentes iniciativas ciudadanas entre las cuales se encuentra la constitución de una sociedad privada con el objetivo de ofrecer cuidado y tratamiento a las personas con enfermedad mental. El objetivo era construir y gestionar un centro psiquiátrico modélico, que ofreciera las técnicas más avanzadas de la época a pacientes de diferentes clases sociales.

El proyecto estaba impulsado por el Dr. Emili Briansó Planas y contó con el apoyo del abogado, político y mecenas Pau Font de Rubinat. Estos reusenses ilustres convencieron a un grupo de 35 convecinos para que formaran parte de la sociedad privada que debía posibilitar la idea, y que se constituyó el 15 de noviembre de 1896. Inspirada en los ideales humanistas, patrióticos y progresistas de la época, encargaron el proyecto de "manicomio" al arquitecto Lluís Domènech i Muntaner, que con su estilo modernista debía dar forma a los objetivos más innovadores de la iniciativa.

El 1 de marzo de 1900 se inauguró el instituto psiquiátrico y en 1919 se dieron por terminadas las obras sin que se hubiera completado el gran proyecto original diseñado por Domènech i Muntaner.

En 1922, cuando fallece el Dr. Briansó, el Instituto Pedro Mata ha llegado a los 500 pacientes y es una de las mejores instituciones psiquiátricas de Europa. En 1936 la entidad alcanza los 1059 pacientes, una cifra que no se volverá a recuperar hasta el año 1955, ya en plena posguerra y después de una costosa y larga reconstrucción.

 

El cambio generacional en la dirección del Instituto Pedro Mata a partir de 1968, con la dirección de Ramon Vilella y el Dr. Francesc Tosquelles, la presidencia de Francesc Font de Rubinat y la incorporación de un grupo de jóvenes psiquiatras, propicia que el centro sea pionero en España en la evolución de los hospitales psiquiátricos .

En 1987 se compra Villablanca, que significa el primer cambio importante en el modelo asistencial del Instituto Pedro Mata, ya que entra en el mundo de la discapacidad intelectual. A principios de la década de los 80 se establecen los primeros acuerdos con la universidad (concretamente la Universidad de Barcelona) y empieza a dibujarse la línea estratégica que define hoy nuestra organización, que se basa en
  Asistencia + Docencia + Investigación
A comienzos de los años 90, con el cambio de modelo político que integra la salud mental en la red sanitaria pública de la Generalitat, se produce una auténtica renovación y reconversión del sector de la salud mental y del Instituto Pedro Mata en particular. El fruto de este cambio es una importante modernización de los dispositivos asistenciales, su integración en la comunidad y la ampliación de la actividad relacionada con la discapacidad intelectual y la asistencia social (servicios especializados y residenciales para discapacitados, gestión de servicios geriátricos, inserción laboral , tutelas, hogares residencia, etc.).

Esta diversificación de la actividad y de las entidades que gestionan los diferentes servicios ha confluido en la concepción del Grupo Pedro Mata para nombrar al conjunto de organizaciones responsables de los referidos dispositivos y servicios.